miércoles, 5 de agosto de 2015

LA DESINTEGRACIÓN DEL DERECHO



Una mañana soñé este sueño aterrorizador.

 Soñaba que los niños del mundo se desengañaban un día, diciéndose a sí mismos, y entre ellos:

"los padres, las madres, todxs ellxs, quieren dominarnos, usarnos, instrumentalizarnos. Somos objeto de explotación y sojuzgamiento transgeneracional".

Sobresaltado me desperté, pues soy padre. Atormentado por mi propia fabricación. No sabía si era peor mi sueño, la perspectiva de que la imputación del sueño fuera cierta, o la perspectiva de que la situación del sueño pudiera ocurrir.

Le conté el sueño a varios amigos y amigas (madres y padres). La duda, el temor, se dejaba ver en algunos de ellos.

Hay algo peor, me dijo una amiga. Algo mucho peor. No lo creo respondí, corto de imaginación como siempre. Hay algo peor en el sentido de que es igual de malo (igual de malo) pero más fácil de que ocurra, demasiado fácil, y eso es aterrador. Es difícil que tu pesadilla se realice, pues difícilmente los niños del mundo adopten mayoritariamente esa visión paranoica-conspirativa. Pero no es difícil que adopten la visión de que las relaciones padres-hijos son instrumentales, contingentes, contextuales, estratégicas (aunque sean mayoritariamente para el amor y el deber...podrían serlo para la dominación...)...y una vez que la relación es un instrumento, el daño (irreparable) está hecho. De eso estamos siempre muy cerca.

Mi amiga es geóloga, y no tenía idea de lo que significaba lo que acababa de decirme: Me había explicado la devastadora realidad del derecho en la Argentina, que explotó de sentido en 2001 y cuyos pedazos nunca se volvieron a juntar (nunca, lo siento).

Lo que me explicó es aquello que Habermas ya había dicho, claro. Eso de que "la legitimidad del derecho necesita de un momento de incondicionalidad, de no-instrumentalidad".

Casi paradojalmente, decía el tipo, el derecho sólo puede ser legítimo (estar revestido de legitimidad) en cuanto no sea (no sea tratado, concebido, imaginado como) un mero instrumento. Sólo así es posible la legitimidad por vía de legalidad (o algo así).

Ahora bien..."el derecho es instrumento de opresión de clases"; "el derecho es instrumento de opresión de género", "de la oligarquía", "del Kirchnerismo", "del FMI", "de Clarín y las corporaciones", "de la cultura hegemónica", " de la iglesia"....de quien sea.

Seguramente ninguna de esas visiones ganará mayoritariamente la disputa por el sentido en ningún lado (como la acusación de los niños de mi sueño), pero lo que mi amiga me mostró, es que sí pueden ganar (yo diría que han ganado) otra, igual de devastadora..."el derecho es radicalmente instrumento" (instrumentalizable).  Más dramático aún, el derecho no es, no puede sino, ser instrumento (instrumentalizado/ble).

Y entonces...el derecho no puede (ya, nunca más) ser legítimo. Game Over (vieron pixels? buenísima peli). 

La pesadilla del derecho argentino, lo que hemos logrado, es desintegrar el elemento ("mítico" dirá el francés, "incondicional" dirá el aleman) que revestía de legitimidad la posibilidad del derecho.

La pesadilla del derecho argentino es que no podemos dejar de deslizarnos por el tobogán de la conciencia de instrumentalización, el big bang del derecho explotó en 2001 y no hay forma de dejar de alejarnos de su centro, que es ya sólo un agujero negro, de nada, de sinsentido.

La pesadilla del derecho argentino es que hemos perdido, renunciado, imposibilitado, la idea de legitimidad del "estado de derecho".

Durante casi 200 años estuvimos peleando por darle contenido a ese ideal (dotarlo de sentido, constitucional, democrático, autoritario, populista, liberal, fascista, fundamentalista, religioso, ateo, etc.) pero presuponiendo todxs su momento incondicional, no instrumental...

Ya no más...nuestra pesadilla es nuestra realidad. 

El estado de derecho es una imposibilidad (pues el derecho, como incondicionalidad, es una imposibilidad).

Sólo hay "estado instrumental".
Y entonces no hay legitimidad posible.
No hay sentido...no hay palabra.
Go and fuck yourself, You know you just can't win! (como dice la canción)

LOST FOR WORDS
https://www.youtube.com/watch?v=1p2mvvxY9vc













9 comentarios:

  1. Gracias. Leerte mientras L.A.S. canta ¡oh, dulce viento! Imaginar un puente, el que sea (ese, el imaginario, donde nos paramos y el viento nos empaña, nos cobija....para enfriarnos) y con una sonrisa entre nihilista y camusiana, musitar entre dientes "ya basta", para inmediatamente...."hay que recomenzar". Es que el derecho es una obra humana, de nuestro mismo barro.
    Saludos.
    A.N.

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    1. Barro, tal vez...
      Gracias por ese puente de empatía que ha construido. Esos, a los que desarlos es ya trazarlos.

      Saludos, y lluvia (que borra la maldad, y lava todas las heridas)...
      ...uh, merde, ya se me clavó una Spinetta entre las costillas, qué día me esperaaaa.

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  2. En que momento de la Historia el Derecho no fue algo No-Instrumental? Y como seria su posterior desarrollo en la historia?

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  3. Gracias.
    El derecho -diría, siguiendo aquel punto de habermas- siempre tuvo y tiene un "momento" (una dimensión) no-instrumental (junto con la también siempre presente "instrumental)...el punto es que, al parecer, lxs argentinxs nos convencimos de que SÓLO es ALGO INSTRUMENTAL...y así es como BAAANG...
    cómo sería...? no se me ocurre...es algo así como pensar el desarrollo de la historia sin moral...no sé cómo pensar eso. cómo la ves vos?

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  4. Volví a releer la nota mi pregunta era porque entendí que planteas que el Derecho no deber ser "Instrumental" pero me equivoque lo aclaras ahora...Yo creo que necesariamente tiene que tener un "principio instrumental" pequeño- mediano etc...en cualquier contexto pues no es un color de "Sombrero"o un "peinado de adolescente" que este de moda" de lo que se habla. Respecto si ya somos una Sociedad que excesivamente observa el Derecho como algo completamente Instrumental yo creo que no,Lo vemos como algo Instrumental SI, pero NO en mayor medida como la haría cualquier Sociedad. Y por supuesto también no creo que desde el 2001 hasta ahora...haya sido diferente a los años-décadas anteriores al 2001. Aclaro también que el termino "Sociedad" que utilice se refiere al grupo minúsculo(siempre) que constituye a la Sociedad Real. Saludos

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    1. nos entendemos bien, me alegro.
      Me gustan esos puntos de desacuerdo que planteas...me están dando ganas de decir algo, gracias!

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  5. el post me recuerda la elegancia del erizo. la novela de Muriel Barbery, profe de filosofía, dice la solapa del libro. con razón. Una pequeña, Paloma, reflexiona cual mafalda sensata y sensible. Su gata se llama Constitución, "no tiene ningún proyecto en la vida y sin embargo se dirige hacia algo, probablemente un sillón". Se refiere a "una juventud dedicada a tratar de rentabilizar su propia inteligencia", a su papá que "todavía cree que existe algo que se llama "deber",y que ello lo protege de la idiotez del cinismo. "La vida tiene un sentido que los adultos conocen" es la mentira universal que todos creen por obligación. Cuando, una vez adulto, uno comprende que no es cierto, ya es demasiado tarde. El misterio permanece intacto, pero hace tiempo que se ha malgastado en actividades estúpidas toda la energía disponible. Ya no le queda a uno más que anestesiarse como puede tratando de enmascarar el hecho..." Retomaría también a John Berger, "la esperanza hoy es un contrabando que se pasa de mano en mano y de historia en historia.." Sh..

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    1. qué linda esa evocación, qué estimulante.
      gracias por esa cita final, ojalá sea así, que la esperanza esté (aún) en nuestras manos.

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  6. :) aquí sigue, en formato imagen, el eco de una laguna colectiva en mano http://sites.stedwards.edu/visuportfolios-mbunnin/files/2013/12/Jerry-Uelsmann-3-v0ztgm.jpg

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